Finca Doña Adela, un rincón único en la Alpujarra

Existe un rincón en la Alpujarra de Almería rodeado de olivos, naranjos y nogales. Árboles centenarios que arropan con mimo un enclave privilegiado para disfrutar de la estancia en familia y entre amigos. Ubicada en la centenaria barriada de Benejí, en el término municipal de Berja, es tradicionalmente conocida como la finca de doña Adela.

Hace apenas un año que este cortijo andaluz abría sus puertas para brindarse a todo tipo de celebraciones. Decorado con un gusto exquisito, en sintonía con los elementos naturales de su entorno, la vegetación se ordena de forma caprichosa hasta conformar distintas estancias. Un salón acristalado, diáfano y apto para distintas reuniones, permite convivir con la naturaleza durante todo el año. Con capacidad para 400 comensales, es un lugar ideal para festejar enlaces matrimoniales, comuniones, cumpleaños y encuentros privados.

Finca Doña Adela también pone a disposición del visitante el propio cortijo. Se trata de una vivienda recientemente reformada, confortable y armoniosa. Diseñada para hospedar a una decena de personas, dispone de chimenea para hacer más cálidos los meses invernales y de piscina para refrescar los veranos, la excusa perfecta para una escapada de fin de semana o para unas vacaciones diferentes. La desconexión está garantizada.