Con sombrillas y toallas: así protestarán los balermeros por su playa a la puerta de la Subdelegación de Almería

Concretamente, han decidido volver a la capital almeriense para llevar esta vez a las puertas de la sede ubicada en la calle Arapiles sus reivindicaciones «y desesperación». Así lo informaba José Antonio Peña, portavoz de la Mesa de trabajo. «No es justo lo que estamos sufriendo en Balerma, teníamos una playa de las mejores del poniente, y nos han creado una ruina», indicaba, haciendo mención al estado en el que se encuentra el litoral balermero en la actualidad.

Y es que «si malas fueron las actuaciones llevadas a cabo en 2015» por el Gobierno del momento, «no son mejores las excusas e inactividad que aplica el actual ejecutivo», del que dicen sentirse «engañados», ya que desde 2021 llevan diciendo que en cuestión de meses estaría la solución a la regresión de la costa de Balerma «y no aparece», a lo que Peña añadía que «el Subdelegado nos ha tomado el pelo ya demasiadas veces y tiene que escuchar el cabreo que hay en Balerma ante el incumplimiento de los estudios y proyectos que nos ha prometido».

Y es que según inciden desde la mesa de trabajo, supuestamente lleva el gobierno gastado más de un millón de euros en estudiar la solución que la playa balermera necesita y los plazos están incumplidos en casi un año, por lo que se preguntan que está pasando y lo que más les preocupa es que nadie de la cara ni salga a decir nada sobre el resultado de esos trabajos, puntualizaba José Antonio Peña. A lo que apostillaba: «El deterioro económico y social de Balerma por culpa de esta dejadez es mayor del que algunos piensan, la playa es para Balerma lo que el sol o el agua para una planta».

Desde este colectivo animan y hacen un llamamiento a la participación masiva en esta concentración que se llevará a cabo el viernes 21 de febrero de 2025 entre las 10:30 y las 13:00 horas, frente a la Subdelegación del Gobierno en Almería, y a lo que han animado a los participantes a acudir con toallas, sombrillas o salvavidas, con el fin de llamar la atención de las autoridades y responsables en materia de Costas, escenificando así la situación en la que se verán este verano los balermeros, tomando el sol en el asfalto, si no llega pronto una obra de estabilización para su playa.