Ana Rodríguez se incorpora al Hospital del Mar, meses antes de acabar Medicina, para luchar contra el Covid-19

Ana Rodríguez tiene 26 años (los cumplió hace tres días, confinada en el piso que comparte con un compañero en Barcelona). Se fue de El Ejido siendo pequeña, por exigencias de su carrera en el fútbol profesional, ya que jugó en el Málaga, el Granada, el Atlético de Madrid y el Español de Barcelona. Antes de eso, cursó sus estudios de primaria en el Tierno Galván y los continuó en el IES Murgi. En uno de sus regresos a El Ejido, recaló en el Liceo Mediterráneo, donde estudió 1º de Bachillerato. Pero el destino la colocó en Barcelona donde empezó los estudios de Medicina, a lo que se dedicó en exclusiva a partir del 2º curso, cuando se vio obligada a abandonar el fútbol. Ana Rodríguez terminaba sus prácticas este mes, tenía sus dos últimos exámenes de la carrera el 20 de mayo y se graduaba el 30 del mismo mes. Pero el coronavirus ha acelerado este proceso y la semana que viene estará trabajando como médico en el Hospital del Mar de Barcelona, junto a otros 13 compañeros más de último curso.

La estudiante ejidense salió por la puerta del Hospital del Mar el día 6, cuando suspendieron sus prácticas, con una gran incertidumbre y sin saber lo que se le vendría encima en tan poco tiempo. «Todas las mañanas teníamos hospital y los últimos días de prácticas ya veíamos venir la situación», relata Ana Rodríguez, que reconoce que en esos días ya se hablaba de algunos casos. Las medidas que se tomaban eran muy básicas, «dejar a un paciente por habitación y poco más, eran muy laxos», detalla la futura médico. Desde que suspendieron sus prácticas no ha dejado de recibir correos de la Universidad, pero «todo era muy confuso, se hablaba de poner fecha a los exámenes para después de Semana Santa, hasta que todo se aceleró y ya empezaron a comentarnos la posibilidad de que nos incorporáramos», detalla Rodríguez. Los propios alumnos, entonces, hicieron una lista que remitieron a la Universidad, en la que se ofrecían siguiendo un orden de facilidad para la incorporación (por cercanía al hospital, entre otros criterios), hasta que la propia Universidad los ha 'llamado a filas'. Se incorporarán, según les han trasladado, al nivel de los R-0, que son los residentes de primera año, que acaban de hacer el MIR y están a la espera de elegir especialidad.

En total, Ana Rodríguez forma parte de un grupo de 14 estudiantes que se distribuirán entre las distintas plantas del Hospital del Mar y estarán supervisados, cada uno, por un médico. «Espero aprender mucho en el training de dos días que haré esta misma semana, aunque creo que estamos perfectamente preparados, ya que esto es nuevo para todos y en Medicina estamos acostumbrados a estudiar mucho», reconoce la joven doctora, que lleva desde que empezó el confinamiento estudiando y leyendo sobre el coronavirus para estar preparada. «Podré ayudar en la parte más básica, como tomar constantes, hacer el seguimiento de los pacientes y cualquier tarea que podamos quitar a los médicos, que son los que tienen que tomar las decisiones más importantes», explica. Pero lo fundamental para Ana es ayudar. De hecho, reconoce que «después de haber tenido que renunciar a muchas cosas como el fútbol, esto hace que haya merecido la pena porque voy a ayudar».

Eso sí, su familia y su entorno están muy preocupados, como los de cualquier sanitario en estos días. Precisamente Ana tenía previsto venir a El Ejido el 2 de abril para pasar la Semana Santa y disfrutar de sus amigos y seres queridos. Ahora no podrá hacerlo, pero no le importa, porque está llamada a una importante tarea que cualquiera no puede desempeñar. Hasta ahora, pensaba en Anestesia o Urgencias para la especialidad, pero probablemente este bagaje le cambie muchas ideas.