El Orgullo LGTBI abre una crisis política entre los socios de Gobierno en El Ejido

Lo que tradicionalmente es un día de reivindicación festiva acabó en la segunda gran crisis entre los socios de gobierno en El Ejido. PP y Vox cerraron ayer la jornada completamente enfrentados tras airear sus disensiones respecto de la celebración del Orgullo LGTBI, este año más deslucido por las restricciones por la pandemia. La crisis comenzó cuando en Vox observaron que los servicios de comunicación del Consistorio habían cambiado la imagen institucional del Ayuntamiento ejidense en las redes sociales añadiendo un arco iris en la esquina inferior derecha. Era un guiño a la celebración del 28 J, el Día Nacional del Orgullo LGTBI, que se celebraba ayer.

Desde Vox, una formación que dice no estar en contra de las demandas de homosexuales, bisexuales y transexuales pero que jamás asiste a los actos del colectivo y critica cualquier labor de concienciación pública al respecto de la discriminación secular experimentada por sus miembros, presionó para que se retirase Y lo logró ayer, en pleno día del Orgullo, a media mañana.La imagen institucional con el arco iris desaparecía de los perfiles institucionales, que volvían a su estado original.

Pero lejos de quedar todo en el seno del equipo de Gobierno, los ultraconservadores hicieron gala públicamente a través de sus redes de ser los causantes del cambio de imagen institucional. «Nosotros estamos en contra y nos opusimos. Hemos hablado con ellos y lo han retirado», trasladaban fuentes internas de Vox a IDEAL. La reacción de los ultraconservadores provocó una reacción airada de sus socios de Gobierno, que inmediatamente devolvieron a las redes una imagen cómplice del consistorio con las demandas LGTBI. En esta ocasión, en torno a las tres de la tarde -unas tres horas después de desaparecer- entraba en las redes un logo municipal con una bandera multicolor ondeante.

«Invito al grupo VOX a trabajar por la no discriminación por razón de orientación sexual, tal y como recoge la Constitución, y no escandalizarse ante la bandera multicolor», trasladaba ayer el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, en declaraciones a este diario. «En todo momento el grupo municipal del PP ha intentado evitar polémicas estériles. En este día, al igual que el año pasado, la bandera multicolor ha estado expuesta en el Patio de Luces del Ayuntamiento de El Ejido. Y como máximo dirigente del equipo de gobierno siempre he procurado mantener un clima de cordialidad y evitar el uso partidista de la institución municipal. Eso mismo es lo que exijo a los miembros de VOX, que representan a sus vecinos por encima de su partido», afeó Góngora. Minutos antes, el regidor popular había mostrado su complicidad con las demandas de «respeto, tolerancia y no discriminación» del colectivo LGTBI. «Insto a Vox a pensar más por ellos mismos y en sus vecinos y dejar a un lado los intereses de su partido a nivel nacional», subrayó el primer edil ejidense.

Para entonces, el PSOE ya había afeado la actitud del Gobierno local. «Mostramos nuestro más profundo rechazo hacia estas lamentables y homófobas manifestaciones realizadas por el socio de gobierno del PP en nuestro municipio. Esto es lo que trae gobernar con la ultraderecha la cual no respeta los derechos alcanzados por el colectivo LGTBI», deslizaban los socialistas en redes sociales.

El de ayer es el segundo gran enfrentamiento de PP y Vox en el gobierno local. El primero llegó a cuenta de otro de los temas polémicos del argumentario de la formación ultraderechista, cuando El Ejido amagó con abandonar el sistema Viogén de seguimiento a las víctimas de violencia de género. Los populares, entonces, también dieron marcha atrás.