Expertos denuncian la pérdida de patrimonio cultural en San Agustín

Expertos en patrimonio como son el arquitecto Miguel Centellas y el investigador sobre patrimonio histórico del poniente y coordinador de la Plataforma Unidos por Turaniana, Juan Miguel Galdeano, junto a la asociación cultural Athenaa denuncian la pérdida del gran valor arquitectónico y artístico de la iglesia de San Agustín, mediante actuaciones difícilmente reversibles y demandan que se tomen las medidas necesarias para que no vuelva a ocurrir un suceso similar en otro de los 13 templos de colonización que hay en tierras almerienses.

En esta línea, apuntan que en la iglesia de San Agustín se produjo hace unos años la desaparición de una buena parte del retablo cerámico del presbiterio, realizado por el artista Julián Gil.

De hecho, la iglesia de San Agustín está recogida en el Catálogo de DoCoMoMo del siglo pasado en su máximo nivel A por sus valores arquitectónicos y artísticos.

DoCoMoMo es un organización internacional creada en 1990 con objetivo de inventariar, divulgar y proteger el patrimonio arquitectónico del Movimiento Moderno y la Fundación DoCoMoMo Ibérico coordina la consecución de esos objetivos en España.

Presbiterio

Pese a ello, el presbiterio de la iglesia de San Agustín ha sido objeto de cambios importantes que han modificado la sencilla disposición inicial.

Así, Centellas y Galdeano hacen hincapié en que «del sobrio retablo cerámico del fondo del presbiterio, solamente quedan los dos cuadros laterales que han sido recortados y reducidos en su tamaño. Ha desaparecido el fondo de baldosas azuladas en relieve, así como la peana del lado de la epístola en que estaba situada la talla de la Virgen de las Angustias y anteriormente la de San Agustín».

Asimismo, señalan que «el elegante altar y ambón de piedra natural han sido revestidos con nuevos materiales, las coloristas vidrieras se han tapado en el vértice de la iglesia y parcialmente en la parte inferior de todo el presbiterio, que se ha llenado de pilastras y molduras doradas más propias del arte de otro tiempo que del siglo XXI. Y para terminar con el altar, el sencillo y discreto sagrario empotrado en el muro posterior ha sido sustituido por uno nuevo sin ningún valor artístico».

Vía Crucis

Del mismo modo, destacan que la iglesia «tiene uno de los Vía Crucis más bonitos de las iglesias de los pueblos de colonización de Almería y no se entiende porqué se han colocado otras 14 estaciones en el perímetro del templo, bajo las vidrieras».

Pese a que tanto estos expertos como desde la asociación cultural Athenaa desconocen quién es el responsable de lo que califican como un «atentado al patrimonio artístico almeriense», sí defienden que se trata de una actuación que no se puede achacar al desconocimiento del valor artístico del presbiterio pues en el año 2009 fue recogido en el libro 'Los pueblos de colonización en Almería. Arquitectura y desarrollo para una nueva agricultura'.

De esta forma, Juan Manuel Galdeano subraya que «la iglesia de San Agustín hasta hace poco había sido un referente en esa evolución artística de mediados del siglo XX. Sin embargo, esta reforma no supone ninguna evolución, sino un retroceso a formas decimonónicas que precisamente el arte de Colonización pretendía dejar atrás».