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Inmaculada Acién
El Ejido
Martes, 29 de octubre 2024, 23:47
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La climatología es uno de los peores enemigos para el agricultor, junto quizás con las plagas. Y el lunes por la noche, la climatología se cebó con el sector hortofrutícola del Poniente almeriense y especialmente con el municipio ejidense. Muchas familias pasaron la noche sin poder conciliar el sueño y sin poder apartar de sus pensamientos cómo estaría su invernadero, el sustento de su casa y su familia, todo ello en un momento crítico de la campaña, con explotaciones que están comenzando a recoger sus primeros frutos y otros que ni siquiera habían comenzado la recolección después de meses de gastos y cuidados.
Los más osados, no dudaron en coger el coche y meterse por caminos destrozados por el granizo, para comprobar cómo estaba su invernadero.Algunos pudieron coger aire tras comprobar que seguían en buen estado, mientras otros se encontraban con la peor de las noticias, su invernadero en el suelo.
Pese a que aún es pronto para tener una cuantificación total del número de explotaciones afectadas por el paso de la DANA, y esa intensa y voraz manga de granizo que sacudió a la zona, las primeras estimaciones apuntan a que podría haber entre 4.000 y 4.500 hectáreas afectadas.
Así, desde la organización agraria COAG contabilizan más de 50 hectáreas de invernadero totalmente derruidas y más de 4.000 con pérdidas y daños muy graves en cubiertas, estructuras y cultivos.
El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, cifró en un primer momento en unas 4.500 hectáreas las afectadas, de las 13.500 con que cuenta aproximadamente el municipio y de» bastantes decenas de millones de euros», los daños.
Desde la Junta de Andalucía, la afectación se situaba en las 4.200 hectáreas solo en El Ejido y Dalías. El consejero Ramón Fernández-Pacheco visitó ayer por la tarde, junto al alcalde ejidense, una de las zonas más dañadas por el temporal en el Poniente almeriense, afirmando que «ahora lo que hay que hacer es una valoración rigurosa de los daños para después actuar y lo haremos desde las oficinas comarcales agrarias en colaboración con las administraciones locales para ayudar a los afectados a través de rebajas fiscales o a través de seguros agrarios. Lo que tiene que quedar claro es que las administraciones públicas estaremos al lado del sector», subrayó.
Hasta el momento y tras los primeros reconocimientos por parte de los técnicos de la Oficina Comarcal Agraria de La Mojonera, se habrían visto afectadas unas 4.264 hectáreas de invernaderos, principalmente de pepino y pimiento tipo Almería. No obstante, recordó Fernández-Pacheco, que estos datos son provisionales.
Asimismo, señaló que existen «diferentes niveles de daños», de manera que en el peor de los extremos, estiman que hay unas 400 hectáreas con daños muy graves en los cultivos y en torno a unas 15 o 20 hectáreas «donde se ha desplomado por completo el invernadero».
Por su parte, la secretaria de Estado de Agricultura y Alimentación, Begoña García, a la que la DANA pilló de visita en la provincia de Almería, también pidió tranquilidad y esperar a disponer de todos los datos por parte de la Junta de Andalucía para establecer los canales de ayuda.
Desde COAG Almería ya reclamaron ayer mismo «que se declare la 'zona de emergencia' como única respuesta viable por parte de la Administración, además de poner en marcha ayudas directas a los afectados para poder recuperar la capacidad productiva y paliar mínimamente los daños», defendió el secretario provincial de COAGAlmería, Andrés Góngora.
Por otra parte, desde COAG Almería también se exigió al seguro agrario que tenga en cuenta el daño específico ocurrido como «daño excepcional», ofreciendo cobertura a los afectados. Así, desde la organización agraria se pidió a los agricultores que se extremen las precauciones pues la alerta aún no había sido desactivada por parte de los servicios meteorológicos y que hicieran prevalecer su seguridad personal sobre los posibles daños en las explotaciones.
Desde la organización agraria de Asaja Almería también manifestaron su profunda preocupación por el impacto devastador que ha tenido el reciente temporal sobre la infraestructura agrícola y los cultivos en el municipio de El Ejido, recordando que A la pérdida económica directa derivada de estas afectaciones se suman los gastos adicionales para los agricultores, quienes deberán realizar reparaciones y reemplazos urgentes para asegurar la continuidad de sus explotaciones.
Entre esos reemplazos se encuentra el del plástico, ya que todas aquellas fincas con cubiertas rotas corren severos riesgos si no se reparan pronto de que los cultivos no afectados por el pedrisco se puedan ver afectados por el viento o incluso por la lluvia, provocando en este último caso, problemas de pudrición.
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