El Auditorio de El Ejido se llena de risas con un espectáculo humorístico de sello almeriense

No obstante, tampoco faltaron las sorpresas y algunos textos nuevos que estrenaron durante el evento.

Así, el primero en salir a escena para ir calentando el ambiente fue Alvarito, que arrancó fuerte con temas escatológicos y la móvil dependencia, poniendo como ejemplo cómo hasta para ir al baño necesitamos llevarnos el móvil.Las redes sociales también ocuparon parte de su monólogo y su uso reducido al absurdo, arrancando las primeras risas sonoras y aplausos de la noche.

Tras él, tomó el relevo Paco Calavera. El tren y esos viajes interminables a Madrid, así como el aeropuerto y su ridículo horario de cierre nocturno fueron dos de los temas abordados por el almeriense, que demostraron que es mejor reírse de los males propios que echarse a llorar por esa falta de buenas comunicaciones en la provincia, y así lo interpretó el público, que no dejó de soltar carcajadas.

Kikín Fernández fue el tercero en salir a escena para centrar su actuación en aquellas pequeñas cosas que te aporta la vida y lo poco que hace falta para ser feliz si nos lo proponemos, pero todo ello con divertidos y curiosos ejemplos que encantó a los asistentes.

Pepe Céspedes y Marco Antonio fueron los dos últimos en salir a escena, si bien entre monólogo y monólogo, los artistas ofrecieron al público divertidos sketches o micro teatros.

Divertidos micro teatros

Pepe Céspedes se convirtió en guía turístico por El Ejido y Almería, lugares que mostraba y explicaba a un grupo de turistas a los que sorprendió con una explicación muy personal de porqué las playas almerienses tienen esos nombres tan curiosos.

Tampoco escapó a la fina lengua de estos genios del humor el dialecto de la tierra llevado al extremo, y es que no hay nada mejor que aceptarse y saber reírse de uno mismo.

La actualidad también tuvo acto de presencia en este espectáculo. Pepe Céspedes interpretó a un pastor y Paco Calavera a una cabra. Una historia de amor con la que mostraron su particular visión sobre la reciente noticia que apuntaba que un hombre está siendo investigado por violar ovejas en una granja de Huércal Overa.

Los cómicos finalizaron con un micro teatro en el que hacían de colegiales disfrazados de elementos típicos de Almería como fueron el Indalo, un tomate raf, el sol de Portocarrero y San Cristóbal.

Una noche muy divertida con la que acercarse al final del año y encarar el nuevo con una sonrisa en la cara.