El Museo del Prado llega a Las Norias

Se trata de la actividad estrella enmarcada en la II Semana Cultural Educativa organizada por la Mesa Local de Educación de Las Norias, y a cuya inauguración no quiso faltar la delegada provincial de Educación y Cultura, Isabel Arévalo, quien como docente y además nativa del Poniente -ya que como recordó es virgitana-, quiso agradecer a toda la comunidad educativa de este núcleo su apuesta por fomentar la cultura y la educación, a través de este proyecto intercultural que tan buenos momentos está haciendo pasar al núcleo ejidense de Las Norias.

Una iniciativa que también contaba ayer con el respaldo del Ayuntamiento, a través del alcalde, Francisco Góngora, quien acudía a la inauguración de este particular museo instalado en el Centro de Usos Múltiples Miguel Candiota, acompañado de varios miembros de los concejales de Educación y Servicios Sociales, así como del presidente de la Junta Local.

Por su parte, el director del CEIP Mirasierra, Emilio Rosa, recordó a IDEAL que este proyecto en el que están involucrados todos los centros educativos de Las Norias, se originó bajo la idea de que «muchos de estos niños quizás no puedan tener nunca la oportunidad de visitar un museo famoso como puede ser El Prado. De esta forma y gracias a la colaboración de Cristóbal Romero, un docente de Las Norias, cuyo padre, Manuel Romero, es además copista oficial de este reconocido museo, lo que nació bajo casi la casualidad se ha convertido en una idea innovadora y original con la que seguir apostando por la integración entre culturas y la puesta en valor de los talentos y la creatividad artística como nexo de unión entre todos sus artífices.

Según explicaba el copista oficial del Museo del Prado, Manuel Romero, entre la veintena de réplicas que se pueden visitar estos días en Las Norias se encuentran «desde Da Vinci, hasta Goya, Velázquez, Murillo, Zurbarán o el artista de mi tierra, Romero de Torres». Así, a través de una visita guiada y en horario de 17 a 21 horas hasta el jueves, no hay excusas posibles para evitar acercarse a la cultura y a la historia a través de un pequeño pero intenso recorrido de algunas de las más importantes obras que acoge el reconocido museo.