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Jesús Sarmiento da vida a un escritor famoso que se reúne con las mujeres de su pasado; aquí junto a la almeriense, Eva Almaya.
‘Ella(s)’, o una oda a la complejidad de las relaciones y a las emociones de vivir en pareja

‘Ella(s)’, o una oda a la complejidad de las relaciones y a las emociones de vivir en pareja

La propuesta en clave de comedia para esta semana dentro del Festival de Teatro de El Ejido deja al descubierto un vaivén de lecciones sobre el amor, el egoísmo, y el deseo

Elizabeth De la Cruz

Sábado, 28 de mayo 2016, 07:46

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Un vaivén de emociones, el instinto del deseo, el propio carpe diem, un amor que también podría tener forma de egoísmo y la necesidad de dar respuestas, o al menos aparentar querer ofrecerlas, se presentan al desnudo en la comedia de Teatro Sin Red, Ella(s). Un montaje bajo la dirección de Maribel Ripoll, y que abrió la comedia, tintada a veces casi de drama, en esta nueva semana de programación del Festival de Teatro de El Ejido.

La sencillez de su puesta en escena, ya que toda la obra se desarrolla en habitaciones de hotel, está cuidada además por una sugerente música jazz que concuerda con el origen de este espectáculo, escrito por el americano Neil LaBute. Sin embargo, esta elegancia acompaña a su vez al gran reparto formado por la almeriense Eva Almaya, Marta Belmonte, Aída de la Cruz, Liz Lobato y Jesús Sarmiento.

Esta historia cuenta cómo un conocido escritor recorre todo Estados Unidos para saldar cuentas con su novia del instituto, una mujer casada con la que tuvo una aventura, otra con la que engañó a su primera novia, y hasta la chica que siempre se arrepintió de haber dejado. Todo eso bajo el hecho añadido de que está a punto de casarse, y que ha cambiado. O lo parece.

Una habitación de hotel, que se redecora en cada escena por unas, en ocasiones simpáticas, y en otras algo torpes camareras de piso, dan paso a diálogos interminables, pero repletos de humor y aún más ingenio. La iluminación y el ambiente de conexión con el espectador no deja apenas lugar a la distracción, si bien las risas, quizás por esa adaptación, no calaron demasiado en los presentes. No obstante, Ella(s) es una oda a la complejidad de las relaciones llevadas al límite, que deja muy buen sabor de boca, pausado pero con filosofía, en el público que sólo puede asentir con la cabeza.

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