El relato sabio de medio siglo de vida

Porque en la tarde del jueves, el Teatro Auditorio Municipal de El Ejido, acogió el acto inaugural de homenaje de su 50 aniversario. Un emotivo acto al que asistieron antiguos profesores y alumnos del centro, junto a autoridades, vecinos y estudiantes que a día de hoy, acuden a estas aulas para formarse y enriquecerse, no sólo en lo intelectual, sino también en lo humano.

Así, esta importante cita, que comenzó a las 20.30 horas, se inició con una bienvenida que corrió a cargo del actual director del IES, Alejandro González Rus, que fue el encargado de presentar a los presentes sobre el escenario, y que además este misma semana, recogió el reconocimiento que otorga este periódico a ese medio siglo de vida del que fuera el primer IES de la comarca del Poniente.

Seguidamente, tanto el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, como la delegada del Gobierno de Andalucía en Almería, Gracia Fernández, pronunciaron a su vez unas sentidas palabras de recuerdo, ya que ambos estudiaron y se formaron en este centro educativo, del que conservan a día de hoy, según reconocieron, vivencias y experiencias que les acompañan en sus vidas.

Un especial apartado tuvo también en este homenaje la figura del ya desaparecido Manuel Martín Fornieles, quien cedió los terrenos donde se construyó este instituto, y padre del cineasta ejidense, Manuel Martín Cuenca, quien protagonizó a través de un video unas emotivas palabras de reconocimiento y recuerdo, al igual que lo hicieron dos de los nietos de Martín Fornieles.

En el ecuador del acto inaugural, el primer director del IES Santo Domingo, don Juan Llerena Pachón, protagonizó sin duda el mejor discurso de la noche. A modo de un enternecedor relato con el que describió la sociedad que se encontró hace 50 años al llegar a El Ejido, y cómo el instituto fue evolucionando de forma paulatina para convertirse en lo que ya es hoy día. Con esa apelación al color de «esos rojos ladrillos» que cubrían la fachada de este instituto, hasta la frase hecha más adaptada a los nuevos tiempos con el «meeting point of teenager», los asistentes no perdieron detalle de esta esperada gala, que concluyó con actuaciones musicales y discursos de antiguos alumnos y profesores.